Recorrer el Teatro Británico fue sumergirme en un mundo donde el arte se vive y se siente.
La primera parada fue la Galería John Harriman, donde nos mostraron las obras ganadoras del concurso de acuarela John Constable, dedicadas a los paisajes peruanos. La técnica, delicada y compleja, me fascinó. Cada pintura ofrecía una mirada única y me permitió apreciar la sensibilidad y creatividad de los artistas.
Luego nos dirigimos al Teatro Británico, un espacio histórico que en 2025 celebra 20 años de producciones propias. La gestora cultural Pamela Alderson nos guió con entusiasmo por los camerinos, las tramoyas y el escenario, revelando secretos y anécdotas de cada obra. Subir al escenario y ver las marcas en el piso, testigos de tantas historias contadas, me hizo sentir la esencia viva del teatro y la pasión que envuelve cada función.
Además, nos hablaron de la obra «Como te gusta», una puesta que promete ser imperdible. Esta experiencia me permitió conectar con el arte de manera profunda apreciando tanto la técnica de la acuarela como la magia del teatro.

Ana Paula Burga
Sin duda, ser parte de este recorrido reforzó mi amor por el arte y me recordó que cada pintura, cada escenario, cada historia tiene el poder de emocionarnos y transformarnos.